"La percepción de los colores en un ambiente"
A la hora de elegir los colores de un espacio, hay que tener en cuenta como los percibimos, para lograr la sensación deseada al entrar a ese espacio y como convive el color con los otros elementos del espacio.
Cuando lo que se quiere lograr es una sensación de amplitud en un espacio pequeño, lo ideal son solo los colores claros y fríos. Si bien los colores fríos producen una sensación relajante, también pueden ser percibidos como un ambiente triste si no se combinan con pequeños detalles de colores cálidos, ya que estos aportan un toque de vigorosidad al ambiente.
A su vez hay que tener en cuenta como son las combinaciones y como convive con los otros elementos del espacio, ya que por ejemplo los espejos dan una sensación de multiplicación del color.
No obstante el artista Kandinsky (1910), desarrolló una teoría del color y de cómo los percibimos afirmando que el color se imagina primero de manera abstracta y, en cuanto queda delimitado por una superficie, adquiere un tono determinado.
El color de un espacio es lo primero que percibimos al entrar, por lo
cual es el principal elemento de decoración ya que influye afectando las
proporciones del espacio, y el estado de
ánimo de las personas que se encuentren en el lugar.